Hoy, 15M,
nueve años después del inicio de un movimiento muy ilusionante en sus orígenes
y bastante decepcionante después, es día de fiesta local en mi ciudad y la Primavera
está exultante. A pesar de todos estos motivos de celebración las calles siguen
vacías y sólo las palomas están de fiesta, que ellas siguen a lo suyo, al
cortejo y a ser, ahora más que nunca, el mejor ejemplo de la Libertad
para los que las miramos desde nuestra ventana.
Hasta que los
humanos no vivimos algo que constituye un punto de inflexión en nuestra rutina,
solemos ver el paso del tiempo aletargados, sin prestarle demasiada importancia
a la sucesión de los días. Luego llega un día en el que algo, bueno o
malo, te pone patas arriba tu normalidad
y ya nada parece igual, incluso la mera sucesión de los días adquiere otra
dimensión. Y ahí estamos ahora a nivel global, metidos de lleno en estos nuevos
tiempos en los que la escala de valores ha cambiado y donde se prioriza, o
debería priorizarse, no lo urgente, sino lo verdaderamente importante: estar
vivo, tener un trabajo y mantener un poco la mesura y entereza en el ánimo. Y en estos
tiempos los abrazos, los besos y el contacto físico lo percibimos como algo tan
lejano y tan peligroso que nos parece mentira cómo hasta hace poco cualquiera
se comía un trozo de tarta después de que alguien le soplara encima a las velas
que reinaban sobre ella.
Las noticias que últimamente vienen de los Países
Bajos no dejan de sorprenderme. Ayer -y
siempre- han mirado para otro lado ante un gran SOS en los países de su Comunidad;
vecinos que se ahogan y ellos a lo suyo. Hoy abogan por que los confinados en
soledad nos busquemos un compañero sexual. Todo lo que haga falta para que la
serotonina de Su población mantenga el tipo. Como quien receta una aspirina. Pragmatismo
100%.
Sean cuales sean
los recursos de cada uno para pasar estos tiempos, pensemos que al final
volverán los abrazos y los besos y el contacto humano, como el cortejo de las
palomas. Igual que siempre, año tras año, vuelven las oscuras golondrinas anunciando la Primavera…
aunque sea dentro de un año…
* La fotografía es obra de @barquigrafias.